Tu mirada me contaba cosas, pero de tu boca no salían las mismas expresiones.
Las cosas a nuestro alrededor parecían bizarras comparadas con nuestra conexión.
Nuestros ojos se salían de sus orbitas tratando de disimular lo que pedían nuestros
corazones. Al instante mas incomodo te fuiste sin saludar corriendo tras un cuerpo que
vos suponías era tu elegida... esa era mi ultima oportunidad de mostrarte nuestra realidad. Vacilando mientras una lagrima recorría mi mejilla dejando rastros de
desesperación, te dije TE AMO y en tu cara se podía ver el temor de lo prohibido. Quedaste sin decir nada, entonces, insistente otra vez te lo dije; esta vez con
mas temor que antes. Sin responder te fuiste con la alternativa mas fácil, con una relación
aceptada

Murmurándote al oído, solo obedece mi voz. Ignora al vulgo arrasador competente. Siente mi aliento. Escucha los sonidos tranquilizantes de la noche despreocupada por la llegada del alba. Penetra mi pupila con elegancia. Envuélvete por entre mis hombros hasta alcanzar vivamente mi nuca. Imagina que tus pies son cosmopolitas recorriendo sus pagos con exigente perfección y así recorramos juntos este salón. Planea tu próximo destino, seré tu acompañante ofrecido. Viajemos donde tú quieras, serás el único piloto a bordo de esta nave mágica que logramos juntos. Ahora cierra tus ojos y déjame llevarte de visita a mi destino soñado. Mis labios se fundirán con los tuyos y formaremos un solo alma, un solo cuerpo, un solo sueño. Finalmente, embriagado con nuestra electrificante conexión te diré: me ah encantado compartir este baile contigo.

Sonrisa sabionda porque tu suerte me quiere también; porque esa diminuta gran inocencia dentro de mi y dentro o en parte de vos... se está quemando… ¡Oh! Se pone azul!!
Yo acostumbraba ser un pequeño niño montado en mis shows… ¿Cuál opción es mi opción, qué se supone que supondría? No puedo sin vos, no puedo sin mí…
¡NO PUEDO CAMBIAR!